Madrid cielo adentro.

Cuatro consideraciones fotográficas o no.

Primero: que en más de una pintura y cartones de Goya, incluidas aquellas que hizo desde, La quinta del sordo, en los confines del Manzanares: se aprecia el cielo tormentoso y plomizo de Madrid. Mas o menos fotogénico; siempre alegra un retrato de la ciudad, mas allá de la gente y de los ajetreos futuristas del horizonte de la capital. Y digo futuristas, no por las industrias que apenas existen, sino por las máquinas rodantes y los conductores, y las gruas que reparan todo lo moderno que se rompe, también algunos edificios de aires New Yorkino , como es el caso de las “Cuatro torres”, al final de la Castellana.

Segundo: Sigue siendo una ciudad viva en su poética plana, muchedumbre y otros folclore, los barrios están cada día más activos y el centro; antiguo o nuevo nos puede regalar fotos increíbles, mejor si contamos con su infinidad de edificios históricos. Eso sí, siempre que podamos mirar al cielo o que su luz potente y cegadora, entre en nuestra escena.

Tercero: Es imposible ver la ciudad “del todo”, cada camino que inicies por los alrededores del “Madrid de los Austria” o “La Cuesta de San Vicente”, por donde sea, ves cosas nuevas. Hay miles de colinas pequeñas y pequeños valles dentro de Madrid mostrando contrapuntos visuales. Nos cansamos de caminarla, en los mismos lugares, a las mismas horas y es muy cambiante, nada se repite;como la gente misma que la habita.

Cuarto: No vamos a condicionarnos por la masividad de la fotografía actual, eso en el mejor sentido; es bueno, tendrá que propiciar el desarrollo un día. Ni por el incesante descenso del uso de las técnicas tradicionales. Que si los laboratorios analógicos y la película de 35mm quedan en el plano histórico. Vendrá un gran desarrollo de la tecnología digital asequible, tanto en la forma de capturar imágenes, como reprográficamente, que sustituya los anteriores métodos y se estandarice. Tal como lo hizo el Silk screen, en relación a la Xilografía en el mundo del grabado, tal como lo hizo la Imprenta, en relación a la Caligrafía. Tendremos nuevos procesos masivos para dejar plasmada la buena Fotografía que seguirá dependiendo indefinidamente, del la calidad y el talento del Fotógrafo y no de la Máquina.